Descripción
Es una enfermedad renal poco frecuente caracterizada por nefropatía glomerular con hematuria que evoluciona a enfermedad renal terminal (ERT) y que asocia, por lo general, pérdida auditiva neurosensorial y, ocasionalmente, anomalías oculares.
Epidemiología
La prevalencia a nivel mundial del síndrome de Alport (SA) es desconocida. La prevalencia estimada al nacimiento es de 1/53.000 en Finlandia. Se cree que el síndrome de Alport representa el 2% de los nuevos casos de ERT pediátrica en EE.UU.
Descripción clínica
Los subtipos clínicos del SA incluyen el SA ligado al cromosoma X (LX), el autosómico recesivo (AR) y el autosómico dominante (AD), representando, aproximadamente, el 80%, 15% y 5% de todos los casos de SA, respectivamente. El SA puede debutar a cualquier edad entre la infancia y la edad adulta tardía, aunque, por lo general, se manifiesta más temprano (en la infancia o la adolescencia) en las formas LX y AR. Los varones se ven gravemente afectados en el SALX, presentando microhematuria a una edad temprana, seguida de microalbuminuria, macroproteinuria con progresión a ERT antes de los 40 años de edad. El SALX es altamente variable en las mujeres, desde mantenerse asintomáticas hasta una hematuria microscópica crónica (con preservación de la función renal) o insuficiencia renal a una edad temprana. La pérdida auditiva neurosensorial es frecuente. Las anomalías oculares ocasionales (p.ej. lenticono anterior, retina moteada, lesiones corneales) pueden desarrollarse al final de la infancia o en la edad adulta temprana, afectando a los varones con mayor frecuencia que a las mujeres. Excepcionalmente, puede asociar leiomiomatosis (en el esófago, el árbol traqueobronquial o los genitales femeninos), resultando en el SA ligado al cromosoma X - leiomiomatosis difusa (SALX-LD). El SA autosómico recesivo (SAAR), es similar al SALX en los varones, aunque no presenta diferencias de género en el curso de la enfermedad ni en los antecedentes familiares. El SA autosómico dominante (SAAD) va desde una enfermedad asintomática (presentándose principalmente como una hematuria benigna familiar) hasta formas AD con proteinuria y glomeruloesclerosis focal y segmentaria (en casos sin hematuria o ni como presentación de primera línea). La progresión a ERT suele ser más lenta que en el SALX y las manifestaciones extrarrenales son menos frecuentes.
Etiología
El SA está causado por un defecto estructural del colágeno tipo IV, un componente esencial de la membrana basal glomerular. El SALX se debe a mutaciones en el gen COL4A5 (Xq22.3) que codifica la cadena alfa 5 del colágeno tipo IV. El SAAR y el SAAD se deben a mutaciones en los genes COL4A3 (2q36.3) y COL4A4 (2q36.3) que codifican las cadenas alfa 3 y 4 del colágeno tipo IV, respectivamente. El SALX-
Métodos diagnósticos
El diagnóstico se basa en los antecedentes familiares, los signos clínicos, el examen por microscopía electrónica de la biopsia renal (que muestra anomalías de la membrana basal glomerular) y en los hallazgos inmunohistoquímicos en la biopsia renal y cutánea (aunque no permite establecer el diagnóstico en todos los pacientes). Las pruebas genéticas moleculares pueden confirmar el diagnóstico.
Diagnóstico diferencial
El diagnóstico diferencial incluye la hematuria asociada a enfermedades urológicas y a cáncer, la nefropatía por IgA, la nefropatía asociada a la mutación MYH9 y la hematuria familiar benigna.
Diagnóstico prenatal
El diagnóstico prenatal y preimplantacional en embarazos de riesgo es posible cuando la mutación causante de la enfermedad ha sido identificada previamente en un miembro de la familia.
Consejo genético
La mayoría de los casos de SA siguen un patrón de herencia dominante ligado al cromosoma X, aunque también se han descrito formas AR y AD. Se debe proponer asesoramiento genético a las familias afectadas.
Manejo y tratamiento
El manejo del SA es únicamente sintomático, con el objetivo principal de ralentizar la progresión a la ERT. Incluye inhibidores del sistema renina-angiotensina (p.ej. inhibidores de la enzima conversora de angiotensina, antagonistas de los receptores de la angiotensina), diuréticos y una dieta con restricción de sal. Los casos más graves requieren diálisis y terapia sustitutiva renal. Se recomienda realizar un seguimiento auditivo y ocular regular. Se deben prescribir audífonos cuando sea necesario y se puede considerar la cirugía para las anomalías oculares.
Pronóstico
El pronóstico del SA es desfavorable debido a la progresión a ERT (afectando a menudo a adultos jóvenes). Sin embargo, el trasplante renal suele ser eficaz, ya que el desarrollo de anticuerpos anti-colágeno tipo IV es excepcional. Las manifestaciones extrarrenales pueden afectar la calidad de vida.
Revisores expertos: Dr Laurence HEIDET | ERKNet* - Pr Rachel LENNON | ERKNet* - Última actualización: Marzo 2020