Descripción
Es una discapacidad intelectual sindrómica ligada al cromosoma X caracterizada por manifestaciones clínicas que debutan en la infancia temprana con pérdida auditiva, seguidas de distonía progresiva o ataxia de inicio en la adolescencia, discapacidad visual desde la edad adulta temprana y demencia a partir de la cuarta década.
Epidemiología
La prevalencia del síndrome de Mohr-Tranebjaerg (SMT) es desconocida. Se conocen más de 90 casos (37 familias), pero no todos han sido descritos en la literatura.
Descripción clínica
La aparición de una pérdida auditiva neurosensorial prelocutiva o postlocutiva rápidamente progresiva, único síntoma característico de la enfermedad, se produce en la primera infancia (18 meses). El fenotipo audiológico está caracterizado por neuropatía auditiva con conservación de las EOA (emisiones otoacústicas), PEAT (potenciales evocados auditivos del tronco cerebral) anómalos, pobre discriminación del habla , que empeora en entornos ruidosos y que experimenta un beneficio cuestionable del tratamiento mediante implante coclear (muy pocos casos descritos). Al mismo tiempo, pueden surgir manifestaciones neuropsicológicas, tales como cambios de personalidad, paranoia, y discapacidad intelectual leve. Desde la adolescencia temprana se desarrolla un trastorno del movimiento lentamente progresivo que aparece como paratonía (resistencia difusa al movimiento pasivo de las extremidades), distonía (principalmente generalizada o focal) o ataxia, acompañado de reflejos tendinosos vivos, clonus aquíleo y respuesta plantar extensora. Los pacientes presentan agudeza visual reducida, fotofobia, defectos adquiridos de la visión de color y escotomas centrales de inicio a los 20 años aproximadamente, evolucionando a ceguera legal hacia los 30-40 años. A partir de la cuarta década, también se desarrolla demencia progresivamente lenta. En aquellos pacientes con síndrome de genes contiguos (SGC) pueden presentarse infecciones recurrentes. Las mujeres portadoras pueden estar levemente afectadas, con discapacidad auditiva leve y distonía focal. Aunque la herencia es recesiva ligada al cromosoma X, se conocen algunos casos de la enfermedad descritos en mujeres afectadas de distonía.
Etiología
El SMT está causado por una mutación en el gen TIMM8A (localizado en Xq22) o por un SGC en Xq22, dando lugar a distonía-sordera por una deficiencia de peptina 1 (DDP1). Si el SGC incluye el gen de la tirosina quinasa de la agammaglobulinemia de Bruton (BTK), se producen infecciones recurrentes secundarias a esta agammaglobulinemia ligada al cromosoma X (XLA).
Métodos diagnósticos
La combinación de discapacidad auditiva e infecciones en un paciente varón debe hacer pensar en secuenciar el gen TIMM8A. Las técnicas de neuroimagen se utilizan para verificar la presencia de atrofia cerebral. En casos de sospecha del SGC, está indicada la prueba para XLA.
Diagnóstico diferencial
El diagnóstico diferencial incluye los síndromes de MELAS, de depleción del ADN mitocondrial (forma encefalomiopática con aciduria metilmalónica) y de Arts, la ataxia espinocerebelosa ligada al cromosoma X tipos 3 y 4; los síndromes de neurocantocitosis de McLeod, de Usher tipos 1 y 2, de Wolfram, la sordera neurosensorial no sindrómica autosómica recesiva tipo DFNB, el síndrome de Pendred y otras formas de distonía o, muy excepcionalmente, la ataxia de Friedreich
Diagnóstico prenatal
Se puede proponer un diagnóstico prenatal a las parejas o padres afectados para futuros embarazos.
Consejo genético
El modo de herencia es recesivo ligado al cromosoma X, por lo que se debe proporcionar consejo genético a las familias afectadas. Cuando la mujer es portadora, el riesgo de que la descendencia masculina herede la enfermedad es del 50%, mientras que la descendencia femenina tiene un riesgo del 50% de ser portadora. Cuando un varón se ve afectado, la descendencia femenina es portadora obligada y la descendencia masculina no hereda la mutación patogénica.
Manejo y tratamiento
El tratamiento del SMT es sintomático y evoluciona con el tiempo. Los audífonos se usan con un éxito variable. En casos de pérdida auditiva leve, una opción es un dispositivo auditivo e implantes cocleares, mientras que en casos de pérdida de audición más grave se recurre a audífonos con pistas visuales. El manejo de la discapacidad auditiva es un desafío al tratarse de una neuropatía auditiva. El manejo de la distonía y la ataxia incluye el tratamiento con agonistas de GABA junto con re-educación psicomotora y fisioterapia. Otras medidas de apoyo incluyen terapias para la sordo-ceguera que aborden las deficiencias sensitivas progresivas, como puede ser el lenguaje de signos táctil. En aquellos pacientes con complicaciones secundarias, la inmunoglobulina intravenosa puede prevenir infecciones en la XLA. Además, deberá evitarse la vacunación con virus vivos en los casos de XLA. En la edad adulta, deben realizarse revisiones neurológicas regulares (evaluación de la demencia y/o las manifestaciones psiquiátricas).
Pronóstico
El pronóstico es desfavorable. La combinación de sordera y ceguera afecta gravemente a la comunicación, mientras que el trastorno progresivo del movimiento da lugar a una marcha cada vez más inestable. La esperanza de vida es muy variable, situándose la edad de fallecimiento entre la adolescencia y con posterioridad a los 60 años.
Revisores expertos: Pr Lisbeth TRANEBJAERG - Última actualización: Agosto 2019